OPINIÓN: EL VALOR DE UNA NOTA

Inicialmente, este artículo de opinión se iba a llamar "El valor de un número", porque voy a intentar destripar una parte de lo que se esconde tras el mundillo de los análisis de videojuegos. El motivo es que desde siempre parece que las notas con las que se puntúan a los videojuegos son demasiado altas. Si se puntúa de 0 a 10, ¿por qué vemos que algunos juegos sí rozan el 10, pero nunca ninguno roza el 0? Voy a intentar explicarlo. 

Pero antes de empezar, lo primero que hay que tener en cuenta es que los videojuegos, como cualquier otra forma de expresión, influyen en cada persona de forma diferente en función de sus gustos personales. La música, el cine, la pintura... los videojuegos, todos son forma de creación que se caracterizan porque una misma obra puede gustar a unos más que a otros. Por eso, una aventura que a mi me puede parecer una obra maestra, a otro le puede parecer un juego del montón. O al revés. Por eso cuando leemos un analisis, es imprescindible fijarse en quién lo ha escrito y puntuado, porque dos analistas pueden tener dos opiniones diferentes del mismo juego.

Uncharted 3, el juego mejor puntuado: 9,9

Una vez con este punto bien claro, y partiendo de que en este blog todas las notas y todos los análisis provienen de la misma persona (servidor), al menos se garantiza una mínima coherencia entre los juegos. Una coherencia que es más importante de lo que parece y que más adelante explicaré por qué. Obviamente intento ser lo más imparcial posible, pero aún con esas, es imposible evitar que mis gustos personales interfieran en la nota, aunque sólo sea un poco.

Entrando ya en materia, ¿por qué este sistema de notas? ¿Por qué puntuar 20 apartados y luego sacar la media? Bien, creo que la mejor forma de sacar un único número que defina el valor de un juego, es haciendo una media de muchos elementos. Creo que no tiene sentido hacer como por ejemplo IGN, que puntúa varios apartados por separado, pero luego no hace la media. No tiene sentido que todos los apartados tengan un 7 y luego el valor del juego sea un 8 o un 6. Por otro lado, es muy injusto pensar en todos los elementos del juego asignarle un número basado en una valoración global, porque puede no ser muy acertada. Es más fácil y más justo valorar por encima cada pequeño apartado del juego y luego obtener una media exacta que sí pueda definir el valor de cada juego.

PAIN, el juego peor puntuado: 1,5

Recuerdo que cuando iba al colegio, con sacar un 5 en un examen ya estaba feliz y contento porque era un aprobado; y ya si sacaba un 7 me sentía el tío más listo del mundo. Pero resulta que si un juego se lleva un 7 parece que es una basura de juego. ¿Qué pasa aquí? Pues varias cosas. Lo primero que tenemos que tener claro es que un videojuego es un producto que pagamos con nuestro dinero, por lo que si vamos a abrir la cartera, vamos a exigir la máxima calidad posible, ¿verdad? Si voy a comprar un juego y en la estantería tengo dos títulos que cuestan lo mismo, obviamente me llevaré el que ha sacado un 9 y no el que ha sacado un 7. Igual que los bufetes de abogados se rifan a los estudiantes que acaban la carrera con matrícula de honor, pero pasan olímpicamente de quienes la acaban por los pelos. A ver, no nos engañemos, un 7 es una buena nota que demuestra que es un buen juego, y si ese juego costara menos sería para pensarlo, pero si los dos juegos cuestan lo mismo no hay mucho que pensar. Cualquiera se llevaría el juego de 9. Y por eso miramos las notas, para saber cual es el juego de 9 y cual no.

Otra cosa que hay que tener en cuenta es que las empresas diseñan los juegos pensando en las notas que van a llevar. Los directivos son conscientes de que si un juego no lleva buenas notas en la mayoría de las revistas o sitios web, sus ventas se van a resentir, así que a los proyectos más importantes se les asignan presupuesto enormes, con plantillas de 100 a 200 trabajadores y sumas de dinero que superan el centenar de millones de dólares. Por hacer una comparativa, estos juegos con tales presupuestos son como estudiantes que se preparan un examen a conciencia, que estudian para sacar una nota de 9 para arriba. Si no la sacan, es un fracaso, por mucho que lleven un notable la sensación al final es mala. Con los juegos pasa lo mismo, si después de un desarrollo largo y costoso, la prensa puntúa uno de estos juegos por debajo del 9, es un fracaso y así lo sentimos nosotros. Porque esperábamos más, y ese es el problema, la expectativa.

El juego polémico: ¿sólo un 5,5 fue lo correcto?

Por otro lado también hay juegos que no aspiran a tanto. Juegos independientes que se hacen con presupuestos bajos y que no necesitan tantas ventas para cubrir costes. Juegos que equivalen a quienes estudian para el 6 o para el 7, si llevan menos nota de un 6 es decepcionante, pero si superan el 7 es toda una alegría, sobre todo si esa buena nota se refleja en unas ventas mayores. Cosa que por lo general suele pasar.


Me gustaría aclarar que hasta ahora no sólo he querido referirme a este blog, sino a todos los medios que puntúan videojuegos. Aunque me gustaría matizar que dejo fuera a las revistas, generalmente de papel, que puntúan todos los análisis de 7 para arriba. Éstas, a las que evitaré nombrar (aunque seguro que todos las conocemos) lo hacen únicamente para ganarse el beneplácito de la distribuidora del juego y conseguir así que contrate publicidad en la revista.

Volviendo al tema de los análisis, el principal problema a la hora de puntuar suele ser la coherencia entre los diferentes análisis de un mismo sitio. Por ejemplo, Bayonetta y God of War 3 son juegos más o menos de temática similar y casi de la misma época, pero muy diferentes en concepto. Mis gustos personales hacen que, al margen de la calidad de cada uno, God of War 3 me guste mucho más que Bayonetta. Hablamos de un juego occidental contra uno oriental, de ahí las diferencias. Ahora bien, la coherencia viene en que si no me gusta Bayonetta por su estilo oriental, luego no puedo, por ejemplo, hablar de Ninja Gaiden y decir que me encanta, cuando comparten el mismo estilo. Eso no es coherencia y es el gran problema de la mayoría de los sitios web y revistas en general. Hay mil ejemplos para demostrarlo.

Skyrim llevó un 8,4. ¿Merecía más a pesar de sus carencias?

El problema de esto radica en que es imposible para una sola persona jugar a todo, por lo que en el momento en que puntúan dos personas o más, seguro que se producirán incoherencias en las notas, por los gustos personales de cada analista. Por eso en sitios famosos podemos leer buenos análisis, pero las notas generalmente no tienen sentido. Eso es algo que intento que no pase aquí, siendo yo el único analista.


También intento evitar el problema que generan las notas globales puestas a ojo, mediante el sistema de la media exacta de tantos valores como sea posible. Creo que es la forma más sincera y objetiva de valorar un producto. Sobre todo cuando se usa el mismo sistema para todos los análisis. Y debo reconocer que a veces incluso yo mismo me sorprendo de los resultados que salen en ciertas ocasiones, con notas finales más altas o más bajas de las que inicialmente pensaba que iban a salir.

Final Fantasy XIII obtuvo un 6,9. ¿Sería una mala nota si fuera la de un examen?

Por ello espero que Notas PlayStation sea un sitio donde poder comprobar y comparar el valor real de los juegos viendo un simple número. Por supuesto que cada jugador tendrá su propio criterio y dará sus propias notas, pero animo a todos a que comprueben la nota que otorgarían a su juego favorito analizando cada apartado individualmente y sacando la media al final. Tal vez os llevéis alguna sorpresa.